Después de enteraros de la gloria del templo, ahora tendremos darshan. Los devotos avanzan en largas colas para el darshan del Señor; algunos cantando bhajans, algunos saludando al Señor con sus gritos de Jai. Todos quieren pertenecer a Mahadev y convertirse en Suyos. El Rey Nandi, el toro sentado fuera del templo, realza su gloria y grandeza. Podréis sentir el poder del templo, tan pronto como entréis por sus puertas principales. Ese momento ha llegado cuando el Señor estará ahí delante de nosotros. Todos están perdidos en ese mundo divino, ya que abrazan al Señor después de haber tenido Su darshan y haberle ofrecido sus oraciones y adoración. Ese sentimiento no puede describirse en meras palabras. Sólo se puede experimentar y para eso, uno tiene que ir allí y caminar hasta Su morada en persona. ¿Cuándo se sacia el corazón de un darshan? Sin embargo, después de haber tenido darshan del Señor, todos salieron dentro del horario programado y, pronto, el Sankirtan comienza a reverberar en el patio del templo.

El templo delante de nosotros y los picos del Himalaya de trasfondo, ¡es como si nos hubiéramos asegurado la oportunidad de presenciar la gloria del Señor Shivá en Kailash! El Señor es muy feliz. Nadie quiere irse de allí. Un montón de recuerdos preciados y lágrimas derramadas por amor al Señor, que fluyen de nuestros ojos, aferrándonos a este amor dentro del corazón, comenzamos a caminar hacia abajo. Cada objeto y aspecto de la naturaleza reverbera con un canto de Har Har Mahadev, lo que hace que nos detengamos, pero entonces, ¿las ataduras de este mundo nos permiten detenernos y permanecer? Todo el grupo ha descendido cuando llega el anochecer y todos han llegado a Gauri Kund.

…continuará…